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AÑO 2025
La
sensación de angustia era asfixiante. Me faltaba el aire y un reguero de sudor
frio y salitroso descendía por mi sien. El pirata Strauss estaba frente a mí, y
su mirada dura e inflexible delataba que esta vez no iba a tener piedad. Una
brisa de aire con olor a rancio balanceaba su larga coleta. Mientras sus
lacayos me sujetaban por los brazos, se acercó lentamente y alzó el machete
dispuesto a abrirme el cráneo…..
De
repente se encendieron las luces y la inmensa pantalla de 360º se apagó. Ahora recordaba
que estaba sentado en una gran butaca giratoria en el centro de la extraordinaria
sala de cine. Alguien vino y delicadamente me quitó el sensocasco y los
diferentes captadores digitales acoplados a mi pecho. También con un suave
tirón me quitó el micrófono acoplado a mi garganta.
Una luz
roja parpadeaba en el techo. Era la señal definitiva para suspender la sesión.
El ritmo cardíaco había subido peligrosamente, y tal y como indicaba el
contrato, si esto ocurría se detenía la película. Parece ser que tendría que
visionar películas de poca acción para poder acostumbrarme al nuevo cine 5-D
Sensorial y poder controlar así mis emociones.
José Gálvez Jara
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