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EROS
Sus
miradas se cruzan. Como cada sábado, Ángela y Carlos acuden al cine Eros. Allí
disfrutan con las proyecciones de sus películas de amor favoritas.
Seis en
punto. Don Alfredo abre las puertas. Ángela se sienta en tercera fila. Como
siempre, Carlos se sienta tímidamente a su lado. Miradas cómplices y sonrisas
tiernas se suceden. “West Side Story”, una película sobre la valentía de amar ante
cualquier impedimento. Armándose de valor, Carlos acerca su mano a la de
Ángela. Para su sorpresa, ella no la aparta. Cómo podría expresar con palabras
cuánto significa ella en su vida. En la oscuridad, sus miradas parecen decirlo
todo.
La
proyección toca su fin. Vergonzosa, Ángela abandona la sala. Temeroso por tener
que enfrentarse a otra semana sin verla, Carlos la sigue.
Una
última mirada frente a las puertas del cine. Ninguno se atreve a decir aquello
que tanto desean. Ambos emprenden el camino de vuelta a casa.
Apenas
habiendo avanzado dos calles, Ángela se detiene. Alza la mirada. “Este es el
momento”, se dice, infundiéndose el coraje que necesita... Sin parar a
pensarlo, da media vuelta, dispuesta a no dejar pasar otra semana sin saber qué
podría haber ocurrido entre ellos.
Miriam Moreno Díez
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