RAÍCES DE PAPEL PUBLICACIONES Y PREMIOS

lunes, 30 de noviembre de 2015

"UN MOTIVO PARA SEGUIR" DE LOLI GONZÁLEZ PRADA, MICRORRELATO SELECCIONADO PARA SU PUBLICACIÓN EN EL V CERTAMEN DE MICRORRELATOS DE CINE "ARVIKIS - DRAGONFLY" 2014

                                              
Un motivo para seguir

Apresado en susurros de una nostalgia que me tiene agotado, he tomado la decisión de poner fin a mí existencia. Ella ya no está y el desconsuelo es un constante huracán de tenaz agonía y caudaloso llanto.
La noche sombría llena la estancia, el canario duerme, la espiga amarilla de la Vriesea dormita triste, si cabe, más que su dueño; tras la hilera de películas apiladas, el hámster me observa sin pestañear tratando de descifrar mi melancolía. Paso los dedos por las carátulas de todas esas imágenes que me han hecho reír, emocionarme, temblar y me detengo en una de ellas; mi preferida. El dvd vacila entre mis dedos, tibio me hace rememorar la última vez que disfrute con él; sonrío, dejando que se lo zampe el reproductor.
Reconozco ser cinéfilo, adoro el séptimo arte, y por segunda vez en dos meses logra que la nostalgia huya con las primeras secuencias; tomando la decisión, de que no tengo prisa por poner fin a mis días.

Loli González Prada 


sábado, 28 de noviembre de 2015

"UN FIRMAMENTO DE ESTRELLAS" DE JOSÉ FRAN GONZÁLEZ AMORÓS, MICRORRELATO SELECCIONADO PARA SU PUBLICACIÓN EN EL V CERTAMEN DE MICRORRELATOS DE CINE "ARVIKIS - DRAGONFLY" 2014

Rita Hayworth en "Gilda" (Imagen Internet propiedad de la productora y/o distribuidora

UN FIRMAMENTO DE ESTRELLAS

Era un niño cuando Rita Hayworth cantaba en “Gilda” aquello de (Put the blame on Mame), se quitaba el guante y recibía un bofetón de manos de Glenn Ford… Me escandalizaba viendo a Esther Williams nadando como las sirenas, y a Marilyn Monroe con las faldas a lo loco… ¿Y..? Uf. Qué drama el personaje de Scarlett O´Hara, en ese crepúsculo ensangrentado, llorando y jurando a todo aquello que se llevó el viento (A Dios pongo por testigo que jamás volveré a pasar hambre). Yo resoplaba y me contenía, siempre, ante una banda sonora exquisita, con el vello saliendo de mi piel, y queriendo fundirme en ella, para poder tocar ese firmamento de estrellas…
            Un buen día descubrí que detrás de la pantalla no había nada, tan sólo un oscuro vacío… y que toda la magia del cine provenía del destello que se hacía al final de la sala…
            Ahora soy dueño de ese destello, soy un ilusionista, un niño GRANDE. Me siento como Christopher Lambert en “Los Inmortales”, viendo pasar el tiempo…
(Mi mamá dice que la vida es como una caja de bombones, nunca sabes qué te va a tocar)... Así es Forrest, bien dicho…

           
José Fran González Amorós 




jueves, 26 de noviembre de 2015

"TU SONRISA ME DA PAGO" DE RAFAEL DE LUQUE ESTEBAN, MICRORRELATO SELECCIONADO PARA SU PUBLICACIÓN EN EL V CERTAMEN DE MICRORRELATOS DE CINE ARVIKIS - DRAGONFLY 2014

Imagen internet propiedad de la productora y/o distribuidora

Tu sonrisa me da pago

¿Quién pudo sospecharlo? Te descubrí cuando tus ojos eran ineludiblemente grises y tu rostro se esculpía en mármol, en el tiempo que las palabras se leían y, después, al deslizarse los cortinajes, se inventaban. Mórbidamente te deseé, hora es de confesarlo, cuando tus facciones se tornaron rígidas, bajo la luz cinérea, mientras una sombra oscura acechaba frente a tu alcoba y se aprovechaba de nuestra inocencia, todavía estática. ¿Recuerdas? Por aquel entonces yo vestía un traje a rayas, bebía bourbon y sonreía con las comisuras torcidas cuando me hablabas, rebelándome ante tu ágil respuesta, siempre dialéctica y a menudo tan seductora. Mas ocurrió que tus mejillas se cubrieron de rubor y el carmín de tus labios contrastó con el cárcamo de tu mirada, poseída de toda inspiración, mientras juraste como jamás se volvió a pronunciar juramento alguno, engarzada entre la convicción en contrapicado y el travelín revelador. ¿Cómo no amarte en aquel remoto atardecer?
   Hoy, próximo al fundido en negro y natural the end, sigo buscándote en la vieja sala de terciopelo carmesí, por si apareces; y, si bien ahora comprendo la ausencia de recursividad de tu querer, pícara, embaucadora, tu sonrisa de croma me da pago.


Rafael de Luque Esteban