CITA CON JACK EN UNA NUBE DE NEÓN
Querido Jack:
A veces la vida presenta secuencias inolvidables que grabamos en nuestro recuerdo como fotogramas de una película. Así viví nuestro encuentro, como un momento mágico e irrepetible.
Bajé rodeando el edificio, ignorando el ascensor y buscando una esquina para, bien camuflada, escuchar al conferenciante y adivinarte de lejos entre los asistentes al acto. Pero en el último tramo de la espiral te vi, de repente, al pie de la escalera.
Me quedé clavada al suelo, inmóvil. La escena me paralizó. Nos convertimos en únicos protagonistas de una película donde los demás eran sólo figurantes, personajes de relleno que parecían no estar.
Me quedé quieta y, como a cámara lenta, giraste los ojos hacia arriba y me viste. Sentí tu mirada intensa y dejé de respirar. Tus ojos brillaban y los míos se llenaron de luz. Pensé: “¡Dios mío, qué guapo es!”. Y seguí sin moverme.
Te disculpaste con “los figurantes” y viniste hacia mí con aplomo. Sólo entonces pude reaccionar y caminar hacia ti, bajando los pocos escalones que nos separaban.
Y en el gran salón, ante espectadores ciegos, nos besamos y alcanzamos juntos un trocito de Cielo.
Paloma Hernández Gayoso (Madrid)
Precioso momento cinematográfico y muy acertado lo de los espectadores ciegos. Enhorabuena, Paloma.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Marcos. Me alegra que te haya gustado y que hayas captado lo que quise expresar. Te conozco, me gusta como escribes y valoro mucho tu opinión. Gracias de nuevo. Un abrazo fuerte. Paloma
ResponderEliminarHola paloma....enhorabuena siempre has escrito muy bonito. Muchos besos .loly cabo
ResponderEliminarMuchas gracias, querida Loly. Muchos besos también para ti. Paloma
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